Qatar Airways, dinero público, mala organización, pozo sin fondos...bla, bla, bla...
Hoy os vamos a contar una historia inventada relacionada con el caso y que por supuesto, cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.
Erase una vez una compañía aérea IMPERIA. Creada por el gobierno del estado en el año 1927 y financiada con dinero público hasta el año 2001. Antes, en 1990 ya anunció que se adaptaría a los tiempos, con vistas a la entrada de la UE.
Por esos años, coincidiendo con la mayor crisis de IMPERIA, se pensó que sería conveniente liberalizar el mercado. Al parecer, tras más de 60 años operando, IMPERIA no sabía hacer las cosas. Así, los gobernantes y administraciones optaron por incorporar al mercado las nuevas propuestas de un empresario salmantino y unos peleteros de Alcalá de Henares, dando lugar y licencias a dos nuevas compañías: LA EUROPA y ESPANIAIR.
Al parecer, era cierto que IMPERIA no sabía hacer las cosas, pues estas dos nuevas incorporaciones crecían y crecían, mientras IMPERIA recortaba y recortaba. Pero no era suficiente. Decidieron entonces inventarse un nuevo modelo para deshacerse de gente y sus condiciones laborales. La subrogación. En este primer intento, pese al acuerdo y firma de representantes del personal de tierra, los trabajador@s afectads denunciaron por otros medios dicho acuerdo, resultando haber sido un proceso ilegal.
Entonces, unos se dieron cuenta que no se podía engañar fácilmente a plantillas con conocimiento, antigüedad y estabilidad. No tenían miedo. Para ello IMPERIA prefirió dejar que fuera su "durísima competencia" ESPAÑIAIR, quien iniciara de nuevo el mismo proceso.
En esa ocasión, la juventud, inexperiencia, la ausencia de representación legal, el miedo y demás factores, permitieron sin problema alguno desprenderse de los trabajadores de tierra para pasar a crear la primera empresa de handling NUEVAEMPRESA (bajo la tutela y dirección de la propia ESPAÑIAIR).
Ahora sí, con el proceso ya aceptado, los señores de la representación social junto con los políticos, se apresuraron a cambiar la regulación existente para adaptar esa nueva situación a la legalidad. Pocos años después LA EUROPA, seguiría el mismo camino dando lugar a GRANFORT.
Esa gran regulación permitía a las empresas desprenderse de gran parte de su personal, vender a otros ese negocio y además derivó en otra nueva regulación para decidir a quiénes les corresponderían la explotación del negocio: Llegó el concurso de handling.
Tu empresa y negocio ya no dependía de lo que fueses capaz de vender. No dependía de oferta y demanda. Dependía de la decisión FAENA y otras instituciones públicas.
Este hecho derivó entre varias cosas. Por un lado aparecieron en escena el TOP10 de los concursantes. Florestinos, Poclowiz, los Getas...Por otro, "desgraciadamente" en IMPERIA se vieron obligados a cerrar varias bases y a desprenderse, muy a su pesar, de sus trabajadores.
Su experiencia de más de 70 años no les sirvió para no perder esos concursos. Entre otras, se perdió la simbólica base de Marquelona.
Así surgió un nuevo acuerdo con uno de sus competidores más directos, LA EUROPA, creándose una UTE con su filial GRANFORT.
Curiosamente estos acuerdos comerciales entre "competidores directos" se han multiplicado con el paso del tiempo, llegando a compartir participaciones más allá de los aeropuertos.
Curioso decimos, porque la competencia de ESPAÑIAIR y LA EUROPA, ha sido y es la principal causante de los recortes de la veterana IMPERIA. Recortes que obligaron a abrir ERE perpetuos donde se despedía con indemnizaciones y ventajas a aquellos empleados veteranos que tenían condiciones laborales "fuera de mercado", o lo que es lo mismo, ya se podía contratar más barato y hacer más, así que, por qué no aprovecharlo. Esta competitividad derivada de las malas y pobres condiciones laborales de las jóvenes plantillas de GRANFORT y NUEVAEMPRESA, forzaron de nuevo a IMPERIA a crear una nueva empresa de "bajo coste" y menor duración, CLIPAIR. Nació pero no creció. Poco después fue comprada, fusionada o lo que sea por un nuevo invitado, FLYING, presidida por un antiguo ministro de fomentación y por lo tanto, conocido y conocedor del negocio y reparto de aeropuertos y pasteles.
Pero no siempre estas empresas eran de los mismos dueños. Antes, hubo alguna iniciativa empresarial que pretendía prestar servicios de transporte aéreo, VUELA MADRID, pero cerró. Instituciones publicas decidieron parar su actividad por motivos de seguridad en sus aviones. Aviones que luego, sí serían seguros para volar en las compañías y filiales de los señores de siempre.
Pero un viernes, de repente ESPAÑIAIR dejaba de operar. La crisis, las pérdidas, los cataríes...
De nuevo una decisión política ponía a 4000 empleados en la calle. Pero no se trataba de 4000 empleados normales. Eran empleados "caros", tenían jornadas reducidas, derechos laborales, hasta disfrutaban de contratos indefinidos. La misma situación de su "exfilial" NUEVAEMPRESA. Su plantilla era indefinida, trabajan sólo 5 días a la semana, estaban estructurados y organizados, conservaban categorías profesionales y ponían en evidencia las actuales condiciones de los empleados de IMPERIA y GRANFORT que, además de librar sólo 1 día a la semana, trabajar un máximo de 12 meses en un periodo de 18, estaban obligados a prolongar sus jornadas al momento, según el antojo de su empresa. Este último punto se había llegado a denominar "remejora", haciendo alusión a la excelente estabilidad que esta medida ofrecía a sus víctimas.
Además, por esas fechas, IMPERIA estaba a punto de lanzar IMPERIA XPRESS, LA EUROPA necesitaba menos competencia y el exministro de fomentación estaba preparado para suplir a ESPAÑIAIR.
Cerca de 30 aviones Airbus a estrenar, cientos de permisos de vuelo, "slots" y una bolsa de empleo de 4.000 profesionales con experiencia con los que contar para sus medidas de expansión. El plan era perfecto, para volver a recortar derechos y condiciones. Perfecto para abaratar costes laborales. Sólo quedaba cerrar los flecos de los cierres. Si pagaban los despidos el negocio ya no sería tal. Unos costes de indemnización que asustarían al más pintado. 4.000 despidos a 45 días/año, con una antigüedad media de 12 años y unos salarios por encima de la media de las empresas de nueva creación o de los nuevos modelos contractuales de IMPERIA.
Así, ante este panorama, la única solución es que ese coste lo pagaran otros. Los ciudadanos.
ESPAÑIAIR y NUEVA EMPRESA, decidieron pedir ayuda a su "competencia y enemigos", IMPERIA, FAENA, las administraciones públicas e incluso los malvados representantes sociales. Rápido encontraron solución. Pon un administrador concursal, solicita el concurso de acreedores y despide a tantos que no sea posible pagarlos. Así el buen administrador público podría trasladar el coste de los 4.000 despidos a las arcas públicas. Evidentemente, que el dinero público se use para pagar los despidos de empresas privadas, no es malgastar. Una vez incluso invirtieron en bancos.
Un entramado de administraciones públicas, FAENA, partidos políticos, jueces y empresarios afines, IMPERIA, LA EUROPA, NUEVA EMPRESA ...que presentaron un modelo de negociación de condiciones laborales NUEVO, pero igualmente PREMEDITADO. Acababan de descubrir que este nuevo modelo, era más rentable y rápido que negociar un convenio.
Esos hechos desencadenaron varias acciones de protesta y denuncia, tan insistentes que enseguida fueron atendidos. IMPERIA XPRESS, AIRING Y GRANFORT junto con los defensores de las condiciones laborales, se ofrecieron "muy generosamente" para salvar y acoger (a mitad de precio) dichos dramas humanos. Empleos a tiempo parcial, eventuales, con distribución irregular de la jornada, movilidad funcional...Por tener tenían hasta "remejoras".
Moraleja. Si desde la liberación de los aeropuertos y la privatización de IMPERIA, son siempre los mismos, ¿por qué no lo son tus derechos y condiciones?
